Fermentación tradicional en piletas de concreto con epoxi entre 22 y 27 grados, el concepto es dejar que la uva se exprese, tratarla suavemente. Luego de la fermentación maloláctica se llenan inmediatamente las barricas de roble americano y francés. Utilizo barricas usadas y un 30% de barricas nuevas cada año. Trabajo con las borras finas durante los primeros meses de la guarda en barricas, luego el vino descansa por lo menos 20 meses en las mismas, con un trasiego durante los primeros 12 meses. El desafío es hacer un vino elegante, que exprese la personalidad de la uva, su lugar, tenga carácter, pero que sobre todo sea un vino que le guste a la gente.